¿Qué es regularizar? La guía completa para entender su importancia en el ámbito asegurador

Qué es regularizar

A la hora de contratar un seguro, no siempre tenemos en cuenta los cambios de circunstancias que pueden afectar nuestra cobertura. Por ejemplo, comprar una vivienda nueva, realizar reformas importantes o cambiar de actividad laboral son situaciones que impactan directamente en las condiciones de una póliza. De hecho, ignorar estas actualizaciones puede generar coberturas insuficientes o incluso problemas legales en caso de siniestro. Por eso, desde Ambler te explicamos un aspecto central en todo esto: qué es regularizar, su importancia y cómo aplicarlo para evitar problemas futuros. 

¿Qué es regularizar?

Regularizar, en términos generales, se refiere al proceso de ajustar o poner en regla una situación para asegurarnos de que cumple con las normativas, condiciones o requisitos establecidos. En el sector asegurador, este concepto es fundamental para garantizar que las pólizas de seguros reflejen con exactitud las condiciones actuales de los asegurados y sus bienes. Es decir, significa adaptar las coberturas y primas a los cambios en las circunstancias personales o profesionales del cliente, con el objetivo de que estén completamente protegidos frente a posibles riesgos y eventualidades. Así, se reducen los riesgos de conflictos legales o coberturas insuficientes y se refuerza la confianza y la transparencia entre asegurado y aseguradora.

Diferencias entre regularizar y otros términos relacionados

Entendemos que este concepto puede generar confusión. Por eso, para entender qué es regularizar, detallamos su diferenciación con estos términos: 

Ajustar

Este concepto significa realizar modificaciones o adaptaciones en algo para que funcione mejor o se ajuste a una nueva realidad. Sin embargo, ajustar no siempre garantiza que estas modificaciones cumplan con las normativas establecidas, ya que el enfoque principal está en la adaptación, no en el cumplimiento legal.

Modificar

Se refiere a realizar cambios específicos en algo, con el objetivo de actualizar o mejorar ciertos aspectos. Aunque modificar puede ser necesario para adaptarse a nuevas situaciones, tampoco asegura que dichos cambios cumplan con todas las regulaciones pertinentes, lo cual deja al proceso incompleto desde un punto de vista normativo.

Veamos un ejemplo para ilustrar mejor la diferencia. Imagina que te mudas y, en ese caso, deberás notificar al seguro, ya que mudarse a una zona con mayor riesgo puede requerir un ajuste en la prima para garantizar la cobertura adecuada. Aquí, nos referimos a un ajuste en la póliza de seguro debido a un cambio en la situación del asegurado, es decir, una mudanza.  Si el nuevo domicilio está en una zona con mayor riesgo, la aseguradora podría requerir un ajuste en la prima para asegurar que la cobertura sea adecuada para el nuevo barrio. Este proceso de notificar y ajustar la póliza es una forma de regularización.

¿Por qué es importante regularizar?

Veamos a continuación todos los beneficios de regular una póliza de seguros:

Evitar problemas legales

Una póliza desactualizada puede generar conflictos legales en caso de siniestro, como la imposibilidad de reclamar indemnizaciones o enfrentarse a disputas legales debido a información incorrecta o desactualizada. Por ejemplo, si los datos de los bienes asegurados no coinciden con su valor o ubicación actual, la aseguradora podría rechazar la cobertura, y dejar al asegurado en una situación vulnerable.

Garantizar la cobertura adecuada

Actualizar una póliza asegura que los bienes o personas protegidas estén cubiertos según sus condiciones actuales. Cualquier cambio, como una reforma en el hogar o la compra de nuevos bienes, estará contemplado, evitando sorpresas desagradables en caso de incidentes. Por ejemplo, una vivienda que ha sido ampliada sin notificar el cambio podría quedar parcialmente desprotegida.

Proteger los derechos del asegurado

Por último, mantener una póliza regularizada garantiza una correcta protección, al tiempo que refuerza la confianza entre el asegurado y la aseguradora. Al actualizar periódicamente los datos y condiciones, se limitan los malentendidos y se asegura el cumplimiento de las obligaciones contractuales por ambas partes.

¿Cuáles son los riesgos de no regularizar?

Como hemos mencionado, no actualizar la póliza puede traer graves consecuencia si se sufre un siniestro, tales como:

Impagos

Cuando los asegurados no notifican cambios relevantes pueden surgir errores en el cobro de primas. Por ejemplo, si un asegurado cambia de vehículo y no actualiza su póliza, el seguro podría no cubrir adecuadamente el nuevo automóvil en caso de siniestro. Como resultado, se podrían generar problemas para el asegurado, que no estaría protegido por completo, y para la aseguradora, que podría enfrentar reclamaciones incorrectas.

Coberturas insuficientes

Una desactualización de la póliza puede incluso dejar sin protección bienes o situaciones recientes. Imagina que un asegurado ha realizado mejoras en su vivienda, como la construcción de un garaje adicional, y no actualiza su póliza. En caso de un siniestro, ese nuevo espacio no estaría cubierto.

Reclamaciones rechazadas

Si un negocio, por ejemplo, cambia su actividad de una tienda minorista a un almacén de productos químicos y no lo notifica, la aseguradora podría considerar que el nuevo riesgo no estaba contemplado en la póliza original y, por ende, rechazar cualquier indemnización derivada de un siniestro relacionado.

Proceso de regularización

Comprender qué es regularizar también implica conocer su proceso y cada uno de sus pasos:

1. Identifica los cambios

El primer paso consiste en evaluar y detectar cambios que puedan afectar la cobertura del seguro, tales como alteraciones en bienes asegurados, como la compra de una nueva vivienda, un cambio en la actividad laboral o situaciones personales como el matrimonio o el nacimiento de un hijo. Recuerda que reconocer estas modificaciones a tiempo es muy importante para evitar desajustes en la protección.

2. Recopila todos los documentos

Luego, debes juntar la documentación que respalde los cambios identificados. Pueden ser contratos de compraventa, facturas de bienes adquiridos, permisos de obra para reformas o cualquier justificante que acredite las nuevas condiciones. 

3. Comunícalo a la aseguradora

Notifica los cambios a la aseguradora. De esta manera, podrá adaptar la póliza según las nuevas condiciones del asegurado, y garantizar que la cobertura sea adecuada y esté en regla.

4. Ajustes en la póliza

Finalmente, en base a la información proporcionada, se procede a modificar las coberturas o las primas del seguro según lo acordado con la aseguradora. Este paso asegura que la póliza continúe siendo útil y se proteja al asegurado ante cualquier eventualidad en su nueva situación.

Errores comunes al regularizar

¿Sabías que ciertos errores podrían suponer que no estés correctamente cubierto? Veamos los más comunes: 

Falta de comunicación

Cuando los asegurados no mantienen una comunicación fluida con su aseguradora, se pierden oportunidades de actualizar las condiciones del seguro y garantizar que se ajusten a la realidad actual. Por ejemplo, si un negocio amplia sus actividades y esto no se notifica, los nuevos riesgos podrían quedar fuera de la cobertura contratada, lo que podría ser catastrófico en caso de un siniestro.

No cumplir con los plazos establecidos 

Los retrasos en la comunicación de cambios o en la entrega de documentación necesaria pueden dar lugar a la suspensión de la cobertura o incluso a la cancelación de la póliza. Debe prestarse especial atención a esto en casos como la renovación de primas tras reformas o cambios en los bienes asegurados, donde la demora puede significar la pérdida del derecho a reclamar indemnizaciones.

Tu tranquilidad, nuestra prioridad

Como ves, entender qué es regularizar garantiza que tus seguros siempre estén en regla y se cubran tus necesidades reales. En Ambler, llevamos desde 1991 acompañando a nuestros clientes en cada paso para que disfruten de la tranquilidad de estar protegidos. Nuestro equipo de expertos se especializa en identificar tus necesidades, para así ofrecerte soluciones a medida que garanticen la seguridad de tus bienes y la protección de tus intereses.Trabajamos contigo para eliminar riesgos y optimizar los beneficios de tus seguros. Nuestro objetivo es proporcionar un servicio transparente y de calidad, que te permita sentirte respaldado en todo momento. ¿Listo para proteger lo que más valoras? Ponte en contacto con nosotros y comienza a tomar el control total de tu seguridad.