Los seguros obligatorios para un restaurante o bar dependen de la normativa local, pero en general, los más habituales son:
- Responsabilidad civil general: imprescindible para cubrir daños a clientes, empleados o proveedores por accidentes en el local, como caídas, intoxicaciones o desperfectos.
- Accidentes de trabajo o riesgos laborales: obligatorio si hay empleados, cubre asistencia médica e indemnizaciones por accidentes o enfermedades laborales.
- Responsabilidad civil patronal: protege ante reclamaciones de empleados por lesiones no cubiertas por el seguro laboral.
- Seguro de vehículos: si se realizan repartos o transporte de mercancías, los vehículos deben contar con seguro obligatorio de circulación.
- Seguro de incendios y daños: a menudo exigido por arrendadores o ayuntamientos, cubre el local, mobiliario y equipos frente a incendios, fugas o siniestros.
Además, se recomienda contar con seguros complementarios como interrupción de negocio, robo o responsabilidad profesional. Verificar la normativa local es clave para operar con seguridad y cumplir con los requisitos legales.